El principio de eternidad siempre ha convertido en un principio aparentemente inalcanzable para nuestra especie. Pero desde un punto de vista dogmático, ajeno al tiempo y al espacio, hemos podido crear lo eterno, hemos podido crear ideas, principios humanos y conceptos abstractos que no se degradan con el paso de la 4ª dimensión. Por tanto, lo efímero y evanescente nos permite tocar el santo Grial de los conceptos, la inmortalidad.
Como artista, he basado una parte íntima de mi ser para transmitir el concepto del eterno a través de esta instalación escenográfica audiovisual, realizada con nuevas tecnologías y técnicas de videomapping.